Tras un año de consagración, el kinesiólogo de profesión, analiza lo que fue su temporada al otro lado de la cordillera, nos cuenta sobre su presente, sueños y lo que se viene tanto a nivel de selección como en su club.
¿Qué balances harías de tu primer año en River Plate?
Es súper positivo, ya que llegar a una institución de renombre como River Plate y debutar apenas me bajé del avión, fue un gran desafío y siento que estuve a la altura. Este año, el club estaba rearmando su equipo, habían jugadores nuevos y siento que nos entendimos bien dentro y fuera de la cancha. Me recibieron muy bien y me hicieron sentir como en casa. Estuve presente en dos de las tres fechas y pude jugar 4 partidos, en donde recibí un solo gol. Ganamos 2 partidos, perdimos un partido y empatamos otro. Además, pudimos conseguir el objetivo de clasificar a las finales de la Copa de Plata, que se disputarán a inicios de este 2025.
¿Qué se viene para el 2025, tanto en clubes como selección? ¿Cuáles son tus objetivos?
Este año con la selección tenemos la Copa de Naciones, que se disputará en septiembre, en Kochi, India. El 2023 en esa misma ciudad fuimos campeones de la primera edición de la Copa Intercontinental, así que tenemos muy buenos recuerdos de ese país.
Con River Plate tenemos que disputar las finales de la Copa de Plata en el primer semestre y luego retomar el campeonato 2025. Por otra parte, con mi club Olimpia de Chile, tenemos que disputar la liga chilena.
Mis objetivos con la selección es poder salir campeones de la Copa de Naciones, dejar a Chile en el podio, y con respecto a mis clubes, me gustaría poder levantar la primera copa de River en la disciplina del fútbol para ciegos y lograr el tetracampeonato con Olimpia.
Haz pasado por todas las modalidades de fútbol, desde tu infancia hasta ahora ¿Qué tiene el fútbol para ciegos que fue donde decidiste quedarte?
Lo que tiene el fútbol para ciegos es la dificultad de la modalidad en relación a la labor que tenemos los arqueros, desde guiar dentro y fuera de la cancha, hasta recibir pelotazos a pocos metros de distancia y achicar con valentía los mano a mano que tenemos. Además, se relaciona mucho con lo que me dedico, soy kinesiólogo de profesión, y mezclar el deporte con la discapacidad, siento que fue el plus para seguir en esta disciplina.
¿Tienes alguna cábala antes de cada partido?
“La verdad es que no soy muy cabalero, solo creer en mí y en todo el esfuerzo que le pongo en cada entrenamiento. Visualizarme en cada partido haciéndolo de la mejor manera posible y descansar bien antes: comer liviano, hidratarme bien, hablar con mi familia y mi pareja, escuchar música y dejar mi equipamiento bien ordenado para que no falte nada”.
¿Quién es tu referente?
“Mis referentes en el arco son Sergio Vargas y Oliver Kahn, ya que me siento identificado con la personalidad que tenían dentro de la cancha, su liderazgo y sus excelentes características como arqueros en su época. También está Claudio Bravo, que tuve la suerte de conocerlo el año pasado, cuando visitamos la ciudad deportiva del Real Betis. También, mis referentes de la vida son mi mamá y mi abuelita paterna, ya que me han entregado valores y amor incondicional en todo momento”.
¿Algún sueño o desafío por conquistar?
“Mi sueño es poder clasificar a unos Juegos Paralímpicos con la selección, además de poder disputar un mundial y estar en el podio de alguna Copa América o Parapanamericano. A nivel de clubes, poder salir campeón con mis respectivos equipos”.
Matías, tras un 2024 donde su esfuerzo le ha traído grandes frutos, ya se enfoca en un nuevo año, donde quiere seguir haciendo historia.
